La Comisión de Uso de Suelo, en Sesión Extraordinaria No. 104, el informe final del Pan de Uso y Gestión de Suelo (PUGS) para su futuro debate en el interior del Concejo Metropolitano y su aprobación.
El secretario de Territorio de Hábitat y Vivienda, Vladimir Tapia, manifestó que el PUGS es un plan complementario al Plan Metropolitano de Desarrollo y Ordenamiento Territorial (PMDOT) que marca una visión de ciudad a futuro. “De cómo queremos que la ciudad se desarrolle de una manera equilibrada y sostenible. El PUGS establece las normativas y las reglas urbanísticas, que se tienen que cumplir para llegar a esa visión de ciudad”.
De esta manera, se marcan los usos de suelo para saber en dónde y cuánto se puede construir, o implementar una actividad económica.
El Plan se estructura con la clasificación del suelo, para diferenciar el urbano del rural, importante para cumplir objetivos de conservación de áreas biodiversas, mantener las de agroproducción sostenible por los conceptos de soberanía alimentaria, mientras que en las áreas urbanas se busca promover el desarrollo constructivo y concentrar la densidad poblacional, con accesos equilibrados y equitativos a los servicios públicos.
Comentó que tanto el PMDOT y el PUGS proponen un cambio de modelo territorial, para evitar un modelo expansivo, agresivo que perjudique las áreas rurales, para evitar afectaciones ambientales, económicas y socioculturales.
“El Plan busca un modelo de ciudad compacta, eficiente, que funcione alrededor del transporte público, especialmente al Metro de Quito con sus 15 estaciones, para dar una facilidad de acceso a la mayoría de la población, de una manera equitativa y justa”, expresó el secretario de Territorio.
El PUGS ha tomado en cuenta el proceso participativo y no tiene precedentes en instrumentos de planificación que se han desarrollado anteriormente, manifestó Tapia tras recalcar que para ello se elaboró más de 120 procesos de participación con los diferentes actores urbanos, principalmente de los que conocen más de sus territorios. GAD’s parroquiales, líderes barriales, colectivos; organismos internacionales y los gobiernos nacional y provincial.
El Plan comenzó a elaborarse a finales del 2019, todo el 2020, año en el cual se tuvo que innovar en los procesos participativos por la pandemia y en la actualidad se ha entregado con muchos aportes de la comunidad; lo que ha permitido consolidar y ajustar la propuesta de cómo la ciudad quiere que crezca.
Se espera que el Concejo Metropolitano de Quito tenga su primer debate y su futura aprobación.
