Los cambios introducidos consisten en el establecimiento de un régimen de promoción de las inversiones que se efectúen en nuevos emprendimientos forestales y en las ampliaciones de los bosques existentes.

La Cámara de Diputados dio media sanción al proyecto de Hebe Casado (PRO), mediante el cual la provincia adhiere a la Ley Nacional 27.487 denominada "Prórroga y Modificación de la Ley 25.080", relacionada con inversiones para bosques cultivados.

Dicha normativa fue sancionada el 12 de diciembre de 2019 con el fin de prorrogar los plazos establecidos en cuanto a beneficios impositivos para emprendimientos forestales autorizados bajo criterios ambientales, y estableciendo modificaciones con mejoras sustantivas en torno a la redacción del articulado y la viabilidad de la normativa. Según manifiesta la autora, “existían artículos inaplicables en la práctica que fueron modificados”.

Los cambios introducidos consisten en el establecimiento de un régimen de promoción de las inversiones que se efectúen en nuevos emprendimientos forestales y en las ampliaciones de los bosques existentes. Esa inversión “se encuentra dentro de un marco legal que asegura la sostenibilidad del medioambiente dando beneficios exclusivamente a los emprendimientos que se encuentran zonificados dentro de la Cuenca Forestal”, explica Casado.

Por medio de esta media sanción dada en la Cámara Baja, se busca renovar los plazos establecidos por la modificación del artículo 25º de la ley 25.080, extendiendo los beneficios impositivos nacionales a los emprendimientos forestales, por 10 años desde la aprobación del presente proyecto.

“Mendoza se encuentra actualmente adherida a la ley 25.080 mediante la ley provincial 6.745, los plazos para los beneficios impositivos deben ser renovados teniendo en cuenta que la adhesión se realizó en el año 1.999. En 2012, la provincia adhirió a la prórroga y reforma primera de la ley nacional 25.080”, por lo que se incorporó como práctica la “adhesión a las modificaciones con el fin de explicitar la extensión de los plazos en cuanto a todos los efectos directos de la legislación reformada”, dice Casado.

De esta manera, “los emprendimientos se aseguran la promoción de su actividad mediante beneficios impositivos nacionales y los establecidos por la ley 8.432 por diez años más”, acotó.

Durante el tratamiento en el recinto, la diputada expresó que “este proyecto está orientado a diferentes aspectos. Por un lado, no es solamente declamar la diversidad económica sino que también está orientado a acompañar a aquellos productores que quieren optar por otro tipo de emprendimientos o cultivos y también es importante en cuanto la mitigación del cambio climático”.

“En el 2015, en el Acuerdo con París, lo que se pidió es que se disminuyera hacia el 2030 la disminución de gases. La implantación de forestales, lo que hace justamente, es ayudar a disminuir la emisión de gases”, indicó, “por lo que también estamos participando del cuidado ambiental, en ayudar a detener el cambio climático que tanto nos afecta”.

En cuanto a lo económico, “es una herramienta más para actuar en la bioeconomía, para ayudar a aquél productor que quiere invertir no sólo a corto plazo sino a largo plazo y significa que ese productor va a quedar en la provincia por mucho tiempo y va a brindar trabajo por mucho tiempo

Por su parte, Jorge López (UCR), expresó que “lo que se busca es que los beneficios de la Ley nacional alcancen a la provincia de Mendoza, al sector forestal. Este régimen de promoción se origina en 1999 con la sanción de la ley 25.080 que establecía distintas herramientas para fomentar la implantación de bosques forestales en el ámbito nacional y ayudar a su primera industrialización. Tuvo su correlato en Mendoza a través de la adhesión mediante la Ley 6.745, donde incorpora como beneficios provinciales a esta actividad, la exención de Ingresos Brutos e Impuesto Inmobiliario, en los inmuebles destinadas a esta actividad, y la estabilidad fiscal”.

“Esto estuvo vigente hasta 2019, ya que el horizonte temporal del régimen de promoción es de 10 años”, dijo, y agregó que “llevamos un año sin la adhesión correspondiente y no le permitimos a los productores acceder a estos beneficios”. Es por eso que “es importante para la implantación de bosques forestales poder continuar con ellos,  y por lo tanto tener una herramienta más que permita oportunidades de desarrollo y también fomentar otra actividad para muestra matriz productiva”.

A su turno, Mario Vadillo (CxM), sostuvo que “apoyamos esta iniciativa para el fomento de la plantación de forestales para tener bosques cultivados. Plantar árboles es una inversión a largo plazo, pero pone la economía a marchar y generar trabajo, así como también hace bien al ambiente”.

“En 10 años se habían perdido la mitad de los bosques implantados en Mendoza. Cada vez tenemos menos bosques”, señaló, añadiendo que esta iniciativa ayuda a la “economía circular”.

También Germán Gómez (FdT-PJ), expresó la adhesión de su bancada al afirmar que "es muy importante esta herramienta legislativa, porque permite a través de los subsidios una rentabilidad de la madera, para aquellos que decidieron plantar árboles. Estos instrumentos  permiten el desarrollo, la promoción, motorizar la economía y esta Ley apunta a generar un beneficio económico a este sector tan importante". 

En tanto, Mailé Rodríguez (FIT), adelantó su voto negativo manifestando que “desde nuestro punto de vista no coincidimos con los beneficios impositivos” y que “consideramos que afecta al medio ambiente”.